Día Mundial del Ahorro 2025: Todo lo que no sabías
Origen, historia y consejos para fortalecer tus finanzas personales
Cada 31 de octubre se celebra el Día Mundial del Ahorro, una fecha que busca crear conciencia sobre la importancia de la educación financiera y la planificación económica. En un contexto donde los precios cambian constantemente y el costo de vida aumenta, este día invita a reflexionar sobre nuestros hábitos financieros y a reforzar la práctica del ahorro como una herramienta de estabilidad y bienestar.
¿Cuál es el origen del Día Mundial del Ahorro?
El Día Mundial del Ahorro se instauró en 1924, durante el Congreso Internacional del Ahorro celebrado en Milán, Italia. Al finalizar el evento, el economista Filippo Ravizza propuso dedicar el 31 de octubre a promover el ahorro en todo el mundo. La iniciativa fue respaldada por instituciones financieras y gobiernos, convirtiéndose en una fecha anual de alcance global.
Desde entonces, más de 80 países conmemoran este día con actividades que fomentan la educación financiera y la inclusión económica. Su símbolo más reconocible es la alcancía, también llamada “chanchito de ahorro”, que representa la constancia y la importancia de reservar una parte del ingreso para el futuro.
Lo que no sabías del Día Mundial del Ahorro
Año de creación
1924 en el Congreso Internacional del Ahorro en Milán.
Países que lo conmemoran
Más de 80 a nivel mundial.
Símbolo del ahorro
La alcancía o “piggy bank”.
Nivel de ahorro formal en el Perú
Solo el 42 % de peruanos mantiene un hábito de ahorro formal SBS y el Banco de Desarrollo de América Latina.
Tendencia de ahorro
Crece el uso de canales digitales para ahorrar y administrar finanzas personales.
La importancia del ahorro en la actualidad
El ahorro es una práctica que trasciende generaciones. Permite a las personas enfrentar imprevistos, cumplir metas y construir estabilidad económica. Hoy, su relevancia es aún mayor ante fenómenos como la inflación, los cambios laborales y la digitalización de los servicios financieros.
Ahorrar también fortalece la economía de los países: impulsa la inversión, fomenta la estabilidad y promueve una sociedad más preparada ante crisis económicas. Incluso pequeñas cantidades, acumuladas de manera constante, pueden marcar una diferencia significativa a largo plazo.
7 hábitos para mejorar tu relación con el dinero
1. Define metas de ahorro específicas: Ahorrar sin un objetivo concreto puede hacer que el dinero se disperse. Fijar una meta como un viaje, una compra o un fondo de emergencia ayuda a mantener el enfoque y la motivación.
2. Registra tus ingresos y gastos: Llevar un control mensual permite identificar en qué se va el dinero y qué rubros pueden optimizarse. Existen aplicaciones y hojas de cálculo que facilitan este proceso.
3. Ahorra primero, gasta después: Un principio básico de educación financiera es separar un porcentaje de los ingresos para el ahorro antes de cubrir otros gastos. Esto convierte el ahorro en una prioridad, no en un sobrante.
4. Automatiza tu ahorro: Programar transferencias hacia una cuenta de ahorro ayuda a mantener la constancia sin esfuerzo adicional.
5. Reduce los gastos hormiga: Pequeños consumos diarios como snacks, taxis o suscripciones poco utilizadas pueden representar un monto considerable al final del mes. Identificarlos es el primer paso para recortar excesos.
6. Ahorra aunque tengas deudas: Es posible equilibrar el pago de obligaciones con el hábito del ahorro. Lo recomendable es priorizar las deudas de mayor interés y destinar una pequeña parte fija al ahorro.
7. Evalúa tu presupuesto cada mes: Revisar y ajustar tu presupuesto permite adaptarte a los cambios en ingresos, precios o metas personales. La planificación financiera es un proceso dinámico, no un esquema fijo.
Consejos finales para fortalecer el hábito del ahorro
Empieza con montos pequeños. Lo importante es la constancia.
Crea un fondo de emergencia: idealmente entre tres y seis meses de tus gastos mensuales.
Establece metas a corto, mediano y largo plazo: así sabrás cuánto y por cuánto tiempo necesitas ahorrar.
Involucra a tu familia: enseñar el valor del ahorro desde casa fortalece la educación financiera.
Infórmate antes de elegir un producto financiero: las cuentas de ahorro y los depósitos a plazo ofrecen diferentes beneficios según tus necesidades.
